A finales de agosto la jueza Rogers emitió una restricción temporal para proteger a Unreal Engine, pero no dispensó el mismo trato a Fortnite porque en su opinión Epic Games no había demostrado un daño irreparable como consecuencia de las acciones de Apple. Es más, consideró que la situación parecía haber sido creada por la propia desarrolladora. Ahora Epic Games pide al tribunal que detenga las “represalias” de Apple y lo hace argumentando que sí existe un daño irreparable para su negocio.
En la documentación presentada, Epic Games revela que los usuarios activos diarios de Fortnite en iOS han bajado más de un 60 % desde la desaparición del juego de la App Store. La medición se hizo hasta el 2 de septiembre, cuando la comunidad ya se había dividido por el inicio de la nueva temporada. Epic Games añade que Fortnite tiene 116 millones de usuarios registrados en iOS, casi un tercio de los 350 millones totales. También afirma que el 63 % de los usuarios de Fortnite en iOS solo acceden al juego mediante esta plataforma.
Epic Games muestra su preocupación ante la posibilidad de no poder recuperar los usuarios perdidos y también recuerda que las acciones de Apple han afectado a otros de sus juegos como Shadow Complex Remastered, que fue eliminado de la Mac App Store cuando perdió su cuenta de desarrollador. Además, Epic Games afirma que Apple la amenaza con negar cualquier intento de solicitar una nueva cuenta de desarrollador durante un año.
“Hoy le pedimos al tribunal que impida a Apple tomar represalias contra Epic por atreverse a desafiar su mala conducta a medida que avanza nuestro caso antimonopolio”, dice Epic Games en un comunicado. El desarrollador sostiene que enfrentarse al “monopolio” de Apple es “un paso necesario para liberar a los consumidores y desarrolladores de las restricciones ilegales" que la compañía "ha impuesto en la distribución de aplicaciónes y procesamiento de pagos en iOS”.
Epic Games afirma que si hasta ahora nadie había alzado su voz contra Apple era por temor a las represalias.