“El flagrante desprecio de Epic por sus compromisos contractuales y otras malas conductas han causado un daño significativo a Apple”, se puede leer en el documento de 64 páginas presentado por Apple. “Si no se controla, la conducta de Epic amenaza la existencia misma del ecosistema iOS y su gran valor para los consumidores”. Apple, que no ha mencionado una cantidad específica para la indemnización que espera recibir, también sostiene que la demanda de Epic Games “no es más que un desacuerdo básico relacionado con el dinero”.
Apple aprovecha la demanda para atacar la campaña que Epic Games puso en marcha inmediatamente después de que Fortnite fuera eliminado de la App Store. “A pesar de que Epic se presenta a sí misma como un Robin Hood corporativo moderno, en realidad es una empresa de miles de millones de dólares que simplemente no quiere pagar nada por el tremendo valor que obtiene de la App Store”, dice Apple. La compañía añade que Epic Games ha ganado más de 600 millones de dólares mediante la App Store.
Además, Apple continúa insistiendo en la idea de que Epic Games busca un trato especial, pero que al no conseguirlo recurrió a un “subterfugio” lanzando una actualización de Fortnite que permitía a los jugadores comprar paVos, la moneda del battle royale, mediante un sistema de pago directo. Apple lo describe como un “sistema de pago externo” que funciona como un “robo de comisiones”.
Epic Games tiene hasta el 18 de septiembre para responder a la demanda de Apple. El 28 del mismo mes ambas compañías se encontrarán en el tribunal para escuchar la decisión de la jueza Yvonne Gonzalez Rogers. Para que el juicio se ponga en marcha aún pasarán meses.