Horizon Forbidden West habla sobre las máquinas, su comportamiento, diseño, dinámicas y nuevas incorporaciones

Benzo
Guerrilla Games sigue desgranando los detalles de Horizon Forbidden West y después de hablar sobre las nuevas habilidades, armas y herramientas a las que tendrá acceso Aloy, es el turno de conocer a las máquinas, uno de los elementos claves del juego. Para empezar a lidiar con los “imponentes demonios metálicos” en el Oeste Prohibido tocará esperar hasta el 18 de febrero de 2022, cuando Horizon Forbidden West se ponga a la venta para PS4 y PS5.

El diseñador Blake Politeski recuerda que Horizon Forbidden West desplaza su acción al Oeste Prohibido, así que el equipo de desarrollo ha investigado qué clase de máquinas iban a habitar las diferentes zonas ecológicas y cómo interactuarían entre ellas, con su entorno y con los humanos. “Las máquinas se encargan de cuidar el mundo, por lo que siempre ha sido interesante valorar el papel que desempeñan y lo que puede hacer el jugador para sacar partido de su comportamiento”, explica Politeski.

Horizon Zero Dawn tenía más de 25 máquinas distintas y gran parte del trabajo de Guerrilla Games consistió en sentar las bases y crear los robots más básicos. Con Horizon Forbidden West el estudio neerlandés ha ido más allá para expandir el catálogo. Por ejemplo, querían una máquina voladora más grande que el Rapaz, así que crearon el Alasol, le asignaron un lugar en el mundo y le dieron una función. Las alas del Alasol recolectan energía solar y son vulnerables durante esta maniobra, pero están más alerta cuando están en reposo.

La máquina avisa sobre su salto y el diseño permite detectar fácilmente sus partes vulnerables.

Uno de los principales objetivos de Guerrilla Games es introducir máquinas distintas y únicas a la vez que sigue creando un mundo creíble, así que estos comportamientos tan específicos “se convierten en un fundamento que vamos desarrollando conforme definimos los roles de las máquinas en el mundo”, dice Politeski. “Queremos asegurarnos siempre de que las máquinas están conectadas y de que sirven a un propósito mayor. Se trata de un (eco)sistema que está en armonía, como ocurre en el mundo real”.

Horizon Forbidden West hay más máquinas y tienen más funciones, lo que supone un reto tanto a nivel de diseño como de jugabilidad. Sin embargo, Aloy también dispondrá de un mayor catálogo de movimientos, armas y municiones. Se pueden derrotar las máquinas de diferentes formas y su diseño lo evidencia mediante texturas que revelan los puntos débiles o componentes con los que se puede interactuar. Una opción adicional es usar el comportamiento de la máquina en su contra.

“Ahora, las máquinas del Oeste Prohibido entrañan mucho más peligro, aunque el jugador puede aprender su comportamiento y predecir sus movimientos mediante las pistas sonoras”, explica Politeski. “Por ejemplo, una máquina emitirá sonidos específicos y distintos cuando esté parada, en estado de alerta o cuando vaya a iniciar un ataque”. Además, Aloy mantiene su habilidad de sabotear las máquinas y utilizarlas para luchar, mientras que otros robots la ayudarán de forma indirecta. Por ejemplo, si uno busca recursos lo puede seguir.

El Terremamut es uno de los enemigos más poderosos