La espantada de Savvy Games Group en el último minuto no solo fue dolorosa para los accionistas de Embracer Group, sino que también pasará factura a los empleados, estudios y proyectos de la compañía. Tras este revés, el holding anunció una reestructuración a gran escala dividida en diferentes fases que incluye despidos, cancelación o suspensión de juegos y cierre o venta de estudios. Los saudíes se echaron atrás después haber alcanzado un acuerdo verbal en octubre de 2022 y cuando toda la documentación estaba preparada para ser firmada, según explicó Lars Wingefors, director ejecutivo de Embracer Group.
Se desconoce por qué fracasó el acuerdo, pero Axios sostiene que la asociación tenía como objetivo establecer a Savvy Games como un nuevo e importante sello de juegos.
Savvy Games es una compañía alimentada por el fondo soberano de Arabia Saudí y desde 2022 dispone de 38.000 millones de euros para invertir en la industria del videojuego. Algunos de sus movimientos incluyen la compra de ESL Gaming, SNK y Scopely, así como una participación del 7 % en Nintendo, del 5,8 % de Electronic Arts, el 6,8 % de Take-Two y el 5 % de Capcom. También es accionista de Activision Blizzard. En junio de 2022 Savvy invirtió 1.000 millones de dólares en Embracer Group. Desde entonces las acciones de la compañía han bajado un 65 %, una caída que se explica en gran parte por el fracaso del acuerdo.