La carta se publica cuando el sector de las telecomunicaciones debe hacer frente a inversiones en redes 5G y de fibra para poder cubrir la creciente demanda de los servicios de datos y en la nube. En la misiva los operadores recuerdan que el año pasado invirtieron 52.500 millones de euros, el máximo en seis años, y para seguir con este ritmo piden apoyo político. Durante los peores momentos de la pandemia las actuales redes aguantaron un aumento del 40 % del tráfico de Internet y cada año Europa aboca cientos de millones para el despliegue de fibra.
“Una importante y creciente parte del tráfico de red es generada y monetizada por las grandes plataformas tecnológicas, pero requiere una inversión y una planificación continua e intensiva por parte del sector de las telecomunicaciones”, dice la carta. Aunque no se nombran es fácil deducir que las grandes tecnológicas a las que se pide que paguen por usar las redes son Alphabet (YouTube), Microsoft (Azure), Amazon (AWS) y Meta (Facebook). Netflix no es un Big Tech, pero su servicio de streaming consume una enorme cantidad de datos.
“Este modelo, que permite a los ciudadanos de la Unión Europea disfrutar de los frutos de la tecnología digital, solo podrá ser sostenible si las grandes plataformas tecnológicas también contribuyen a financiar los costes”, se puede leer en la carta de las telecos europeas. Por otro lado, en su epístola los operadores también se quejan de los altos precios del espectro y las subastas, que consideran “insostenibles”.
A día de hoy en Europa ninguna de las grandes tecnológicas estadounidenses paga por el uso de la red, pero la situación es diferente en otros países como Estados Unidos y Japón. En Corea el operador SK Broadband pide que Netflix abone una tarifa por usar su red, pero la compañía se niega. El caso está en los tribunales y una primera sentencia ha dado la razón a la teleco.