La Organización de Consumidores Europeos (BEUC) ha iniciado una 
campaña para defender la legitimidad de la copia privada, presentandola en el Parlamento Europeo. La campaña 
Los consumidores no son piratas surge como respuesta a la criminalización que realizan las industrias discográfica y cinematográfica, centrándose en los siguientes puntos: Derecho a la opción, al conocimiento y a la diversidad cultural Derecho al principio de 
neutralidad tecnológica Derecho al beneficio de las innovaciones tecnológicas sin restricciones abusivas Derecho a la interoperabilidad de contenido y dispositivos…