La Organización de Consumidores Europeos (BEUC) ha iniciado una
campaña para defender la legitimidad de la copia privada, presentandola en el Parlamento Europeo. La campaña
Los consumidores no son piratas surge como respuesta a la criminalización que realizan las industrias discográfica y cinematográfica, centrándose en los siguientes puntos:
- Derecho a la opción, al conocimiento y a la diversidad cultural
- Derecho al principio de neutralidad tecnológica
- Derecho al beneficio de las innovaciones tecnológicas sin restricciones abusivas
- Derecho a la interoperabilidad de contenido y dispositivos
- Derecho a la protección de la privacidad
- Derecho a no ser criminalizado
En una Europa que va siguiendo la estela de los Estados Unidos en cuanto a legislación de copyright hacen falta iniciativas fuertes como ésta para que los europarlamentarios no olviden los intereses de quien deben defender.