Los resultados de Apple se producen por el buen desempeño de todas sus divisiones. La de servicios reluce una vez más con unos ingresos de 13.159 millones de dólares, un aumento interanual del 13 %, pero quien realmente ha dado la talla ha sido el hardware. Las ventas de iPad han dejado 6.582 millones de dólares, un 23 % más que hace un año, y los Mac sitúan sus ingresos en 7.079 millones de dólares, un incremento del 18 % respecto hace un año. Durante este trimestre se ha empezado a vender el renovado MacBook Pro de 13.
Por su parte los iPhone, cuyas ventas estaban estancadas o en declive, logran remontar hasta ingresar 26.418 millones de dólares, un aumento interanual del 5 %. Este ha sido el primer trimestre que Apple ha registrado los ingresos por las ventas del iPhone SE de segunda generación, un dispositivo económico (dentro del catálogo de la compañía) que se despacha desde 489 euros. Por último, los werables dejan 6.450 millones de dólares, un 14 % más respecto al mismo periodo del año anterior.
Todas las cifras se encuentran lejos de las expectativas de los analistas y demuestran que Apple es inmune a la COVID-19, como mínimo por ahora. En consecuencia, las acciones de la compañía suben un 6 %. Debido a la pandemia, Apple no ha facilitado un pronóstico financiero para el cuarto y último trimestre de su año fiscal.
El próximo movimiento de Apple se espera que sea la presentación de la línea de móviles iPhone 12, donde debería estar presente un modelo de 5,4 pulgadas. La tradición dice que se anunciarán y pondrán a la venta en septiembre, pero Luca Maestri, director financiero de Apple, ha dejado caer de forma algo velada que este año existirá un retraso de varias semanas. No sería la primera vez que Apple anuncia un móvil en septiembre y se pone a la venta en octubre.
Otra duda que presenta Apple es si este año veremos o no un modelo de iPhone 5G.