“Desde el lanzamiento, los bots han sido un problema que ha ido creciendo en Lost Ark”, dice Amazon Games en un mensaje a la comunidad. “Nuestro equipo ha trabajado duro para crear herramientas y métodos efectivos para identificar y eliminar bots del juego. Como resultado de este trabajo, el 4 de marzo eliminamos permanentemente más de un millón de cuentas ilegítimas del juego que se ha determinado que utilizan bots”.
En su comunicado Amazon Games reconoce que existe la posibilidad de que “una pequeña cantidad de jugadores sean erróneamente identificados como bots”. “Hemos tomado todas las medidas posibles para evitar que ese sea el caso, pero es posible que encontremos casos extremos”, asegura la compañía. Si un jugador que juega normalmente a Lost Ark y no ha modificado su cliente de juego de ninguna manera pero se ha visto afectado, debe apelar su suspensión enviando un ticket en la página de soporte.
Los bots son cuentas que usan un software para automatizar actividades repetitivas, una práctica que está prohibida en cualquier juego online. Los MMO suelen ser las víctimas preferidas de este tipo de usuarios tramposos, más aún si se trata de juegos free-to-play como Lost Ark. Expulsar un millón de cuentas no es poca cosa, pero otros títulos como PUBG, que hasta hace poco tenía un precio de venta de 29,99 euros, llegó a echar a más de 13 millones de cuentas en un año. Eso son más de 1 millón de suspensiones al mes.
El tiempo dirá cómo afecta esta primera expulsión masiva de bots en Lost Ark. Ayer mismo el juego registró un pico de 759.648 usuarios concurrentes en Steam y ahora mismo hay conectados 664.307 jugadores. El sábado pasado el MMO alcanzó los 960.509 jugadores simultáneos, lejos del 1,3 millones de hace tres semanas.