La división gaming compuesta por el ecosistema Xbox ha visto disminuir sus ingresos un 6 % en comparación con el mismo trimestre del año anterior. Microsoft afirma que esta caída se debe a la menor venta de contenidos y servicios tanto de los juegos first-party y third-party. En su presentación, Microsoft sostiene que la bajada en los ingresos por contenido y servicios se ha visto compensada en parte por el crecimiento de Game Pass, cuyo número de suscriptores no ha sido actualizado. La última cifra que tenemos es del pasado enero, cuando eran 25 millones.
Respecto al hardware, no ha ayudado que los ingresos por la venta de consolas Xbox hayan disminuido un 11 % respecto al mismo trimestre del año pasado. Este descenso posiblemente se explique por la falta de consolas, una situación que también lamenta Sony con PlayStation 5. A pesar del descenso registrado durante el cuarto y trimestre, se estima que el año fiscal de Xbox ha sido de récord gracias a unos ingresos totales de 16.220 millones de dólares.
Respecto a Windows OEM, su rendimiento suele ir ligado a la venta de hardware, así que si este baja, como ha sido el caso durante el último trimestre, los ingresos registrados por la venta del sistema operativo también lo hacen. Sin embargo, la caída es menor que la de Xbox, pues hablamos de una disminución de los ingresos del 2 % respecto al mismo periodo del año anterior. Por otro lado, del resto de negocios de Microsoft destaca Azure y otros servicios en la nube con un crecimiento interanual del 40 %.
Añadir que Microsoft ya se encuentra en el año fiscal 2023, periodo durante el cual espera completar la adquisición de Activision Blizzard a cambio de 68.700 millones de dólares. De momento el mercado no termina de ver con confianza que esta operación se vaya a materializar. La acción de Activision Blizzard cotiza a 79 dólares y Microsoft se comprometió a pagar 95 dólares por cada una de ellas.