El informe presentado por la compañía polaca revela que The Witcher 2: Assassins of Kings (2011) multiplicó por cuatro los ingresos generados por el primer The Witcher (2007). Mientras que The Witcher 3: Wild Hunt (2015) aumentó por once la recaudación lograda por la segunda entrega, una cifra que se multiplica por quince si sumamos los ingresos de las expansiones Hearts of Stone y Blood and Wine. En total, la saga The Witcher ha conseguido vender 33 millones de copias.
CD Projekt Red también ha detallado los porcentajes de ventas de The Witcher 3: Wild Hunt en función de la plataforma. En 2015 la versión de PlayStation 4 fue la más vendida con un 48 % de las copias, pero durante el 2016 se vio ligeramente superada por la de Windows PC (43 %), que en 2017 se impuso claramente a las consolas al lograr despachar un 50 % de las unidades. Durante los tres años la versión de Xbox One ha sido la menos vendida.
En cuanto al formato de las ventas, durante el 2015 un 71 % de las copias traspasadas de The Witcher 3: Wild Hunt fueron en formato físico, un porcentaje que bajó al 40 % y 26 % en 2016 y 2017, respectivamente. Los datos ofrecidos por CD Projekt Red nos demuestran la importancia de las ventas físicas durante el primer año y la imposición tanto del formato digital como de las ventas en PC a lo largo del tiempo.
En términos económicos, CD Projekt Red ha presentado unos beneficios inferiores a los del año pasado que se justifican por la ausencia de grandes lanzamientos y la inversión realizada en nuevos proyectos como Cyberpunk 2077. Sobre el esperado título basado en el juego de mesa de Mike Pondsmith no se han ofrecido detalles, pero sí avanzado que tendremos noticias justo antes de que el E3 2018 abra sus puertas el 12 de junio.