Comenzando por la primera, la RTX 3080 Ti es una evolución técnica de la 3080 base. Su número de núcleos CUDA asciende a los 10.240 frente a los 8.704 del modelo original, mientras que la velocidad de reloj desciende muy ligeramente (de 1,71 GHz a 1,67 GHz en modo acelerado). También crecen los núcleos RT para trazado de rayos (de 68 a 80) y los tensor (de 272 a 320). Finalmente, la RAM pasa de 10 GB de memoria GDDR6X a 12 GB.
Su ficha técnica y las prestaciones que caben esperar de ella la sitúan extraordinariamente cerca de la inalcanzable GeForce RTX 3090, pero su PVP es sensiblemente inferior. Concretamente su precio oficial es de 1.199 euros, aunque esta cifra puede ser un poco optimista dada la situación del mercado. Con todo, Nvidia espera que las modificaciones introducidas para evitar su uso en la minería de criptomonedas ayude a mejorar su disponibilidad.
Por otro lado, la RTX 3070 Ti se configura como una tarjeta que en teoría brinda unas prestaciones muy superiores a la antigua 2070 Super. Posee un total de 6.144 núcleos CUDA y 8 GB de GDDR6X. Como su hermana mayor, estará a la venta a partir de la semana que viene (decir que estará "disponible" tal vez sea echar las campanas al vuelo) con un precio base de 619 euros. Como de costumbre, los socios habituales de Nvidia también han preparado sus propias versiones con características de refrigeración y precios potencialmente diferentes.
Por último, Nvidia ha anunciado que DOOM Eternal, Red Dead Redemption 2 y Rainbow Six Siege recibirán soporte para las tecnologías RTX, así como Icarus, LEGO Builder’s Journey, DYING : 1983, The Ascent y The Persistence. Red Dead Redemption 2 y Rainbow Six Siege incorporarán supersampling por IA DLSS para mejorar su fluidez a alta resolución, mientras que Doom Eternal tendrá además trazado de rayos.
La página oficial de Nvidia tiene un artículo donde detalla los cambios introducidos en todos estos juegos.
