ASML, el mayor fabricante de máquinas para fotolitografía, augura dos años más de falta de semiconductores

Alejo I
ASML no es una compañía que tenga la presencia mental entre el gran público de Intel, AMD, Nvidia, Samsung o incluso TSMC, pero sin ella, no habría procesadores. El fabricante neerlandés de sistemas para fotolitografía está presente en todas estas empresas a través de sus máquinas; una circunstancia que le permite tomar el pulso a la industria de los semiconductores mejor que nadie. Y las dinámicas que está apreciando no son positivas.

Según ha señalado Peter Wennink, máximo responsable de ASML, al diario económico The Financial Times (registro necesario), nos quedan todavía un mínimo de dos años de crisis. La causa es relativamente sencilla: aunque fabrican tanta maquinaria como es posible para llenar las nuevas fundiciones que se están levantando y aquellas en proceso de ampliación, la demanda de sistemas fotolitográficos es muy superior a la capacidad disponible.

El año que viene y el siguiente habrá escasez. Vamos a enviar más máquinas este año que el anterior y [...] más máquinas el próximo año que este. Pero no será suficiente si nos fijamos en la curva de demanda. Realmente tenemos que ampliar nuestra capacidad productiva en más del 50 %. Y eso llevará tiempo".


Cómo piensa ampliar ASML su capacidad de producción en cuestión de meses es una incógnita. Fabricar maquinaria fotolitográfica no es como forjar cigüeñales, pero sus propios clientes están dispuestos a ayudar como sea. De hecho, Pat Gelsinger, CEO de Intel, habría despachado a sus propios expertos en producción para asistir a ASML en medida de lo posible.

Uno de los grandes problemas de ASML es que la empresa también tiene sus propios proveedores de componentes críticos, y ellos tampoco dan abasto. Una de las piezas más importantes del puzle son las lentes de alta precisión producidas por la alemana Carl Zeiss, que también requieren el uso de máquinas especializadas. Según Wennink, ASML necesita tantas lentes para aumentar su producción de máquinas fotolitográficas que Carl Zeiss necesitaría levantar otra fábrica. Y tras ello, esperar 12 meses entre contratar al personal adecuado, certificarlo e iniciar la producción.

Wennink asegura que la carrera de ASML es contra reloj, y es que es muy difícil que sus proveedores puedan tener sus cadenas listas para 2024, cuando entrarán en funcionamiento las nuevas fundiciones de empresas como Intel y TSMC. Ya veremos entonces si la situación ha mejorado sustancialmente o si por el contrario hay que esperar aún más para alinear las curvas de oferta y demanda.
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Dos décadas escribiendo sobre nuevas tecnologías y cultura popular. Si tiene luces o botones, posiblemente he hablado de ello. EOLiano Gran Reserva.

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