El teaser de Black Ops: Cold War no muestra el juego. El vídeo revela que el título está inspirado en hechos reales y centra su metraje en una entrevista a Yuri Bezmenov, un desertor del KGB y disidente soviético que terminó sus días en Canadá. Bezmenov alerta a la audiencia sobre “medidas activas” (activniye meropriyatya), una acción de desinformación llevada a cabo por la Unión Soviética para desacreditar y debilitar a los oponentes y distorsionar su percepción de la realidad. En la Guerra Fría el rival de la URSS era Estados Unidos.
Mientras Bezmenov habla sobre el plan soviético de desinformación contra Estados Unidos que se lleva a cabo durante décadas y en cuatro pasos (desmoralización, desestabilización, crisis y normalización), en el vídeo aparecen imágenes de la guerra de Vietnam, protestas por los derechos civiles, reuniones gubernamentales y discursos de Ronald Reagan, cuya presidencia estuvo marcada por la Guerra Fría. Bezmenov termina su disertación con una advertencia: “la bomba de relojería está haciendo tic-tac, cada segundo el desastre está más cerca”.
Durante el vídeo también se habla de Perseus, nombre en clave de un espía soviético que nunca llegó a ser atrapado. Se dice que Perseus, cuya existencia se basa en archivos del KGB desclasificados, logró infiltrarse en el Proyecto Manhattan que produjo las primeras armas nucleares. Su misión sería la de introducirse en instituciones de defensa estadounidenses para darle a la Unión Soviética una ventaja en la carrera armamentista. Qué hizo después de la Segunda Guerra Mundial es un misterio.
Aún no es oficial, pero parece que Black Ops: Cold War incluirá su propia campaña, modo multijugador y zombies. Sí está confirmado que la experiencia battle royale será la de Warzone, que ha llegado para quedarse y conectar las próximas entregas de Call of Duty.