Empleados de Epic denuncian largos ‘crunch’ de 70 horas semanales para mantener el éxito de Fortnite

Benzo
La práctica del crunch, es decir, un periodo de tiempo determinado durante el cual se trabaja de forma intensa y haciendo más horas de las habituales, parece una práctica generalizada en la industria del videojuego. Los últimos trabajadores que se han atrevido a hablar sobre esta situación son los de Epic Games, equipo responsable del fenómeno Fortnite, que anónimamente han compartido su testimonio en con el equipo de Polygon.

“Siempre estamos en crunch”, afirma una de las fuentes. “El crunch nunca termina en un juego live service como este [Fortnite]. Siempre estás creando más más contenido y más cosas. Trabajaba al menos 12 horas al día, siete días a la semana, durante cuatro o cinco meses. Esto significa que te quedas en el trabajo hasta las 3 o 4 de la mañana”.

Los empleados, que comparten su experiencia bajo el anonimato para no poner en riesgo su puesto, afirman que regularmente trabajan una media de 70 horas a la semana. No estamos ante casos aislados. “Probablemente haya al menos 50 o incluso 100 personas más en Epic trabajando esas horas”, dice uno de los testimonios. Los hay que incluso llegan a las 100 horas semanales. Después de varios meses en esta situación, algunos de ellos informan sobre problemas de salud además de un ambiente hostil y estresante en el trabajo.

Cuando Polygon se puso en contacto con Epic Games la compañía ha reconocido que algunos empleados han llegado a trabajar 100 horas semanales, pero afirma que son “situaciones extremas” e “increíblemente raras”. Cuando se dan, “buscamos encontrar la solución de inmediato para evitar que se repitan”, asegura la compañía.

Epic Games ofrece tiempo libre ilimitado a sus empleados, pero es prácticamente imposible aprovecharlo. “Si me tomo un descanso, la carga de trabajo recae en otras personas”, relata una de las fuentes. “[...] El mayor problema es que estamos parcheando el juego todo el tiempo”. Otro testimonio afirma que en Fortnite “todo tiene que hacerse de inmediato. Si algo se rompe, por ejemplo un arma, no podemos apartarla y arreglarlo en el siguiente parche. Debe solucionarse de inmediato y, al mismo tiempo, seguir trabajando con el parche de la próxima semana. Es brutal”.

Uno de los empleados asegura que “los ejecutivos están centrados en mantener a Frotnite como un juego popular el mayor tiempo posible, especialmente con la aparición de la nueva competencia”. Todas estas horas extras se pagan y en teoría son opcionales, pero desde la administración de Epic Games se da por hecho de que se cumplirán sin rechistar debido a la cultura del miedo.
Fuente: Polygon