En el E3 2018 acudieron más de 200 compañías, 85 de las cuales debutaron por primera vez, se mostraron más de 3.250 productos y permitido a miles de jugadores probar los juegos que llegarán a todos los sistemas durante los próximos meses. Michael D. Gallagher, presidente y director ejecutivo de la ESA, ha descrito el E3 2018 como “un gran éxito” tanto por los jugadores que acudieron a Los Ángeles como por los millones que alrededor del mundo lo siguieron mediante Internet.
Este año Nintendo no ha logrado desatar la locura de ediciones anteriores. En el 2016 la posibilidad de probar The Legend of Zelda: Breath of the Wild en el pabellón de la compañía japonesa provocó una estampida de jugadores, acción que se repitió en 2017 con Super Mario Odyssey. Super Smash Bros. Ultimate ha levantado un gran entusiasmo pero no hay noticias sobre una oleada de jugadores corriendo hacia los expositores de Nintendo Switch.
El E3 se lleva celebrando desde el 1995 en Los Ángeles con dos únicas excepciones: en 1997 se mudó hasta Atlanta y en 2007 tuvo lugar en Santa Mónica. Se desconoce dónde podría recalar en 2020, pero Los Ángeles es una ciudad apetecible para los desarrolladores estadounidenses debido a la gran número de estudios instalados en California y otras partes de la costa oeste.
La próxima cita en el calendario de los jugadores es la Gamescom 2018, la mayor feria de videojuegos europea, que se celebrará del 21 al 25 de agosto en Colonia, Alemania.