Hace algo menos de una semana Microsoft daba a sus trabajadores una noticia que no por esperada era menos traumática: el despido de 10.000 empleados, cerca del 5 % de toda la plantilla de la empresa. En ese momento la información sobre dónde se producirían los recortes más importantes era todavía confusa, aunque había constancia de que como consecuencia directa habría cambios en su catálogo de hardware. Ahora sabemos que los equipos de HoloLens, realidad virtual y mixta se han llevado uno de los peores golpes.
Según múltiples informaciones que han ido apareciendo durante los últimos días, Microsoft ha despedido a los integrantes de los equipos responsables del espacio de trabajo AltSpaceVR (adquirido en 2017) y el framework Mixed Reality Took Kit (MRTK), compatible con los visores de Meta y diseñado para facilitar la integración de motores basados en Unity.
En un principio la pérdida de AltSpaceVR es traumática, pero no funesta cuando se considera que iba a ser sustituido por Microsoft Mesh como apuesta para crear espacios virtuales en el metaverso. Mucho más peliaguda parece la desaparición de MRTK, puesto que estaba a punto de ser actualizado en breve y, como señala Windows Central, podría denotar que Microsoft ya no ve un futuro particularmente fructífero para este tipo de dispositivos (o como mínimo, ya no considera que pueda rentabilizarlos como esperaba hace unos años).
Tampoco pintan bien las cosas para HoloLens. Los despidos entre las filas de esta división son cuantiosos, aunque en su caso parece que el equipo de desarrollo no ha sido totalmente disuelto. La pérdida de un importante contrato para el ejército de Estados Unidos parece que jugó en su contra. Hace varios años el Departamento de Defensa anunció su intención de comprar hasta 100.000 visores de realidad aumentada, comenzando por una primera serie de 6.900 visores por 400 millones de dólares, pero el proyecto fue paralizado parcialmente en respuesta a las quejas de los soldados que participaron en el programa, aquejados de naúseas, dolores de cabeza y vista cansada.
Este contrato era una auténtica línea de vida para HoloLens, que le hubiera permitido capear la crisis con un gran volumen de ventas más o menos definido. Sin estos ingresos, es posible que Microsoft se vea obligada a replantearse el futuro de su visor, aunque por ahora no hay noticias (oficiales u oficiosas) que permitan hablar de su cancelación.
