Actualmente Microsoft cuenta con más de 220.000 empleados repartidos por todo el mundo y esta última ronda de despidos afectará a alrededor del 5 % de su plantilla. Se trata de una reducción de personal mucho más agresiva que la ejecutada en octubre del año pasado, cuando la compañía prescindió de unos 1.000 empleados. En esa ocasión se habló de un “reajuste estratégico”. Para hacer frente a la nueva reducción de personal, Microsoft ya ha anotado en sus cuentas del segundo trimestre un cargo de 1.200 millones de dólares.
Esta ronda de despidos es una de las más grandes de la historia de Microsoft. Supera la de 2009 que afectó a 5.800 empleados y se queda por detrás de la de 2014 que se llevó por delante a 18.000 puestos de trabajo. La reestructuración del 2014 fue ejecutada por Nadella y en gran parte sirvió para integrar la división Nokia Devices and Services.
“Estoy convencido de que Microsoft saldrá de esto siendo más fuerte y más competitivo”, dice Nadella en un mensaje enviado a los empleados de la compañía. Respecto a los motivos, el ejecutivo apunta en todas direcciones. “De la misma forma que vimos a los clientes acelerar su gasto digital durante la pandemia, ahora los vemos optimizar su gasto digital para hacer más con menos”, comenta Nadella. También habla sobre la cautela con la que están avanzando las diferentes industrias en todo el mundo y el contexto económico de recesión.
Microsoft es la última de una lista de empresas tecnológicas que han anunciado recortes de personal durante los últimos meses. En noviembre del año pasado Meta (Facebook, Instagram, Whatsapp) dijo que prescindiría de 11.000 empleados y Twitter echó a unos 7.500 trabajadores, mientras que Amazon anunció hace dos semanas que despedirá a 18.000 trabajadores.