Los seis procesadores hoy presentados se destinan a los usuarios más entusiastas, grupo dentro del cual encontramos a los jugadores. El Core i9-13900K, con sus 24 núcleos (8 núcleos P, 16 núcleos E), 32 hilos y hasta 5,8 GHz, promete ofrecer un 15 % más de rendimiento en un solo hilo y un rendimiento multihilo hasta un 41 % mejor. Este procesador no es para todos los bolsillos, así que también tenemos los i7 e i5, que por su rendimiento y precio suelen ser los más populares entre los jugadores. El resto de la familia, que además de opciones más modestas incluye un procesador capaz de alcanzar los 6 GHz, llegará más adelante.
Sobre la base de un proceso Intel 7 (antes llamado 10nm ESF) y una arquitectura híbrida de rendimiento x86, los procesadores Intel Core de 13ª generación hacen uso de núcleos de rendimiento (núcleos P) y núcleos eficientes (E-core) que dividen las cargas de trabajo de manera eficiente gracias al Thread Director. Este microcontrolador integrado en la CPU optimiza la toma las decisiones de programación de cualquier carga de trabajo para asegurarse de que los subprocesos se están ejecutando en los núcleos correctos.
Los Intel Core de 13ª generación son compatibles con el chipset de la serie Intel 600 y también sacan partido de la nueva serie Intel 700. Este chipset cuenta con ocho carriles PCIe Gen 4.0 adicionales, que combinados con los PCI Gen 3.0 proporcionan hasta 28 lanes. También hay un aumento en el número de puertos USB 3.2 Gen 2x2 (20 Gbps).