Con Wrath of the Lich King también llega Rasganorte, un continente ártico donde el Rey Exánime (Arthas Menethil) espera sentado en el Trono Helado. Antes de llegar hasta él los jugadores deberán explorar un territorio compuesto por ocho zonas, desde Tundra Boreal a el Fiordo Aquilonal pasando por Cuenca de Sholazar, Cementerio de Dragones, Zul’Drak, Corona de Hielo, Cumbres Tormentosas y Colinas Pardas. También hay una zona para el JcJ outdoor, Conquista de Invierno, así como Bosque Canto de Cristal, región donde se encuentra Dalaran, ciudad que ha sido trasladada desde las Montañas de Alterac.
Con la nueva expansión los jugadores de Wrath of the Lich King Classic también tendrán acceso a una nueva clase disponible en ambas facciones: el Caballero de la Muerte. Se trata de la “primera clase héroe de World of Warcraft”. No es que sea más poderosa que el resto, pero sí que es la única que empieza al nivel 55. En la WotLK original para poder crear un Caballero de la Muerte era necesario tener un personaje en el nivel 55, un requisito que ha sido eliminado en la Classic para el primer Caballero de la Muerte. El límite de una de estas clases por servidor se mantiene.
Otras novedades que llegarán con Wrath of the Lich King Classic son la Inscripción como nueva profesión, los logros, nuevas mazmorras y bandas que se pueden completar con un grupo de 10 o 25 jugadores.
Respecto al beneficio de experiencia que aumenta un 50 % la experiencia obtenida para los jugadores de Burning Crusade Classic, estará disponible hasta el lanzamiento de Wrath of the Lich King Classic. En el WoW moderno desde hace algunos días hay un beneficio con el mismo efecto, se llama Vientos de sabiduría y estará activo hasta el inicio de la temporada 4 de Shadowlands, que se pondrá en marcha el 3 de agosto.