Según ha detallado Infinity Ward mediante su cuenta de Twitter, durante esta semana el sistema de emparejamiento de Call of Duty Modern Warfare y Warzone se actualizará para reunir en las mismas partidas a todos los “supuestos tramposos”. Una llamativa mejora de seguridad que podemos encontrar en otros juegos, aunque a menudo no se publicita. Hay otros sistemas que se fijan en la reputación de los jugadores y el matchmaking se dedica a reunir a los usuarios tóxicos en partidas exclusivas.
Otras medidas anunciadas por Infinity Ward y que estarán disponibles esta semana incluyen la recepción de una notificación dentro del juego cuando el jugador tramposo previamente reportado haya sido expulsado; se desplegarán actualizaciones de seguridad adicionales; y se aumentarán los recursos de los equipos backend. Además, próximamente se añadirá la posibilidad de informar sobre un tramposo desde la killcam y el modo espectador, dos puntos de vista desde donde es más fácil apreciar a un fullero.
Donde más se han hecho notar los tramposos de Call of Duty: Warzone y Modern Warfare es en PC, donde los títulos se sirven mediante Battle.net. Debido al juego cruzado el problema no solo afecta a los jugadores de esta plataforma, así que los de PlayStation 4 y Xbox One, sistemas cerrados donde es mucho más difícil violar la integridad del sistema, están optando por desactivar esta función. El juego cruzado es una característica que se debe extender a cualquier título, pero las compañías también deben aumentar la seguridad.
Desde el lanzamiento de Call of Duty: Warzone el juego free-to-play ha logrado registrar 50 millones de jugadores y hasta la fecha Infinity Ward ha expulsado a más de 100.000 tramposos, una cifra que aún queda lejos de los más de 13 millones que ha echado PUBG Corporation de PlayerUnknown’s Battlegrounds a lo largo de tres años. Las medidas de Infinity Ward y Activision también son menos enérgicas que las tomadas por otras compañías como Valve, que permite vincular un móvil a Counter Strike: Global Offensive.