Assassin’s Creed Mirage ambienta su historia en el año 861, 12 años antes de los sucesos de Valhalla, y pone a los jugadores en la piel de Basim Ibn Ishaq, un joven ladrón callejero que se ha criado en las calles de Bagdad junto a Nehal, su cómplice y mejor amiga. Desde que puede recordar, Basim vive acosado por visiones y pesadillas, así que ha comenzado a preguntarse quién es y de dónde viene. Tras un suceso, Basim huye de la ciudad y se une a una antigua organización, los Ocultos, bajo la protección de Roshan. Nuestro protagonista termina en Alamut, la sede de la organización que en este momento está en construcción. Ahí es donde aprende el arte de los Assassins y se convierte en uno de los Ocultos.
La campaña de Assassin’s Creed Mirage dura unas 20 horas.
Basim recibe el encargo de buscar la Orden de los Antiguos, la facción antagonista de los Ocultos, en Bagdad. Esta primera misión pondrá en marcha su viaje de transformación. La historia de Mirage sigue la evolución de Basim de aprendiz a mentor, un periplo que se refleja en los sistemas del juego. Al contrario que las entregas de Assassin’s Creed más recientes, en Mirage no hay un progreso basado en la experiencia, sino que es lineal y se basa en la historia. Al completar misiones, Basim sube de rango dentro de los Ocultos y gana acceso a nuevas oportunidades y herramientas que se pueden mejorar y personalizar.
Los tres pilares en los que se asienta la jugabilidad de Assassin’s Creed Mirage son el parkour, el sigilo y las eliminaciones. El objetivo del equipo de desarrollo es el de ofrecer “una experiencia que fuese una carta de amor al origen de la franquicia”. Para conseguirlo, se ha desplazado la acción a un entorno urbano donde el parkour es un elemento central, mientras que el sigilo es el mejor aliado a la hora de deshacerse de los enemigos. La idea es que los jugadores operen desde las sombras, ataquen y desaparezcan. Basim dispone de nuevos movimientos y mecánicas específicas y, al igual que Altaïr, sus armas principales son la espada y la daga. Basim es un assassin clásico con mecánicas modernas.
El regreso a las raíces de Assassin’s Creed Mirage es por ahora una excepción. La próxima entrega a la que por ahora conocemos como Assassin’s Creed Red, está ambientada en el Japón feudal y será un RPG de mundo abierto.