Los 23,06 millones que Nintendo Switch logró traspasar durante el año fiscal 2022 suponen una caída del 20 % y se comparan con los 28,83 millones de consolas colocadas durante el anterior ejercicio. Nintendo culpa de este descenso a la crisis de los semiconductores y la falta de otros componentes. A pesar de ello, nos encontramos ante el segundo mejor año fiscal en la historia de Switch. Esto ha sido posible en gran medida por el lanzamiento del modelo OLED, que ha logrado compensar, en parte, el bajón de Switch y Switch Lite.
Si nos fijamos en las ventas anuales por modelo, Nintendo Switch lidera con 13,56 millones de unidades, un 33 % menos que el año anterior, Nintendo Switch Lite cae hasta los 3.70 millones de consolas, un descenso interanual del 56,5 %, y Nintendo Switch OLED aporta 5,80 millones de unidades que aún no admiten comparación. El impulso que la pandemia y las restricciones de movimiento dieron a Switch Lite parece que han terminado, mientras que las ventas de Switch OLED compensan la bajada que sufre el modelo estándar.
Para el actual año fiscal que se puso en marcha el 1 de abril el pronóstico de Nintendo es distribuir 21 millones de Switch. Este nuevo descenso nos sugiere que la consola ha superado su pico máximo de ventas anuales y rebasado la primera mitad de su ciclo de vida, situación que Shuntaro Furukawa, presidente de la compañía japonesa, ya había pronosticado hace dos años. Para su próxima consola Nintendo buscará ofrecer una nueva experiencia, pero hasta entonces tenemos Nintendo Switch para unos cuantos años más.