World of Final Fantasy nos plantea una aventura de tintes optimistas que recuerda en algunos de sus elementos estéticos a la serie Kingdom Hearts y toma prestados aspectos del desarrollo de sagas populares como Pokémon, Digimon o Dragon Quest Monsters. Sus protagonistas, los gemelos Lann y Reynn, descubren un día su capacidad para capturar, mejorar y llevar a la batalla a los monstruos de su mundo y a lo largo del desarrollo dominarán la técnica de emplearlos en la construcción de "torres" de tres componentes que mejoran sus posibilidades de éxito y aportan variedad a los combates.
La otra capacidad distintiva de los protagonistas es la de alterar a voluntad su forma física entre una minúscula versión con estética chibi (que recuerda a la empleada en la subserie musical Theatrhythm) bajo la que pueden encaramarse a hombros de un monstruo de cierta talla con otro más pequeño sobre su cabeza y otra de altura normal con la que siempre suponen el peldaño más bajo de las "torres". Estas formaciones pueden cambiarse durante las batallas y los monstruos además de mejorar sus habilidades pueden también evolucionar o involucionar a versiones usables en otra disposición.
World of Final Fantasy llega a PlayStation 4 y PS Vita con el objetivo declarado por su productor Shinji Hashimoto de atraer a nuevos y sobre todo jóvenes jugadores a la franquicia, aunque precisamente este público podría no ser el ideal para apreciar la infinidad de menciones y referencias a los títulos anteriores y sobre todo a su era dorada durante los 90. Con un desarrollo intencionadamente sencillo que solamente promete una mayor complejidad en el aspecto de gestión de los monstruos, el juego estará disponible con textos en castellano y versiones digital y física en una edición normal, otra "Day One" con algunos contenidos extra y una última para coleccionistas con un libro de arte, la banda sonora y tres minifiguras de Cloud, Lightning y Squall.