State of Decay 2 consigue reunir a más de un millón de jugadores durante su lanzamiento

Benzo
Microsoft suma otro éxito a su catálogo al anunciar que State of Decay 2 consiguió superar la marca del millón de jugadores durante sus primeros días en el mercado. Después de Sea of Thieves este es el segundo juego de Microsoft Games Studios que llega directamente a Xbox Game Pass y logra rebasar esta cifra. Además, en esta ocasión no parece que los servidores se hayan resentido.

El millón de jugadores que han emprendido su aventura de supervivencia zombi en State of Decay 2 se registraron entre el 18 de mayo, día que pudieron acceder al juego los propietarios de la Ultimate Edition, y el 22 de mayo, cuando el título de Undead Labs puso a la venta su edición estándar y debutó en el servicio Xbox Game Pass. Microsoft también ha informado que durante el lanzamiento los jugadores han eliminado a más de 675 millones de zombis y jugado de forma combinada durante más de 6 millones de horas.

State of Decay 2 se ha salvado en gran parte de los problemas de acceso que sufrió Sea of Thieves, pero los jugadores reportan algunos problemas de rendimiento en Xbox One X. El equipo de Digital Foundry ha comparado el desempeño del título entre los dos modelos de la consola, llegando a la conclusión de que en Xbox One X el juego luce mucho mejor pero a costa de bajar de los 30 fotogramas por segundo en algunas ocasiones. En cambio, Xbox One S no goza de mejoras gráficas y su resolución nativa es menor, pero la tasa es mucho más estable al moverse entre los 30 y 45 FPS.


Además, los usuarios españoles se han encontrado con la sorpresa de que State of Decay 2 ha llegado sin traducción al castellano y tanto la voz como los textos están en inglés. Existe la opción de jugar con los textos en español latino, pero es necesario modificar el idioma y ubicación de la consola a Español (México) y reiniciarla. Queda por ver si United Labs permitirá cambiar la configuración del idioma dentro del juego y si la política de no traducir los juegos el castellano ha llegado para quedarse.