Raymond fundó EA Motive en 2015 después de abandonar Ubisoft Toronto, estudio al que dedicó 10 años de trabajo, con el objetivo inicial de sacar adelante una nueva propiedad intelectual en colaboración con BioWare. Sin embargo, su primer proyecto fue ayudar al desaparecido Visceral Games en un juego de Star Wars dirigido por Amy Hennig (Uncharted) que terminó cancelado. Posteriormente contribuyó en el desarrollo de Star Wars: Battlefront II. Se desconoce en qué proyecto se encontraba ahora trabajando EA Motive, pero este seguirá su curso.
“EA Studios se centra en ofrecer nuevos juegos y contenido creativo a los jugadores. Laura Miele y su equipo han dado grandes pasos a nivel interno para ofrecer el mejor apoyo a nuestros desarrolladores para conseguir sus objetivos, como expandir la cartera de Samantha Ryan para dirigir más estudios, incluido Motive”, dice Electronic Arts en un comunicado. “Samantha es conocida por impulsar el diseño creativo y ofrecer soporte a los equipos para que puedan hacer realidad sus visiones. Es una experimentada desarrolladora con un catálogo de juegos que van desde Los Sims hasta Batman: Arkham City pasando por No One Lives Forever y el esperado Anthem”.
De momento Raymond no ha comunicado qué piensa hacer, pero curriculum para ir a otra compañía no le falta después de haber producido Assassin’s Creed y ejercer de productora ejecutiva en Assassin’s Creed II, Watch Dogs y Tom Clancy’s Splinter Cell Blacklist.