La historia de Bad Blood se sitúa justo después del final de Watch Dogs, y en ella el hacker T-Bone Grady deberá tomar la decisión de huir y comenzar una nueva vida o luchar contra la corporación Blume para salvar a un amigo. Toda la acción transcurre a lo largo de 10 misiones que permitirán visitar nuevas localizaciones de la ciudad de Chicago.
Junto a la nueva campaña, Bad Blood también introducirá nuevos contratos para “barrer las calles”, que incluye un nuevo sistema dinámico de misiones secundarias generadas de forma procedural que se pueden completar en modo cooperativo. El objetivo de estas tareas será el de acabar con diferentes bandas que han empezado a reclamar territorios.
El contenido también llegará acompañado de nuevas armas (incluyendo cámaras de seguridad armadas), bonificaciones, ropa y Eugene, un coche a control remoto creado por T-Bone.