Activision compra King, los responsables de Candy Crush Saga

David Rodriguez
Activision Blizzard, que con sus marcas Call of Duty, World of Warcraft o Destiny ya contaba con una situación particularmente envidiable en el panorama económico de los desarrolladores de videojuegos, acaba de anunciar los términos por los que llevará a cabo la adquisición de King Digital Entertainment, líderes del mercado móvil con Candy Crush Saga y Candy Crush Soda Saga. La operación tendrá para Activision un coste de 5.900 millones de dólares, representando para los inversores de King un precio por acción aproximadamente un 20% superior al de sus últimas valoraciones.

En un movimiento para el que Activision recurrirá a un préstamo por el 40% del total, la compañía reunirá bajo un mismo techo las franquicias más rentables en consolas (Call of Duty), ordenadores (World of Warcraft) y dispositivos móviles (Candy Crush). Aunque la operación aún deberá ser aprobada por los accionistas de King y las autoridades irlandesas (Activision estableció una subsidiaria en Europa para llevar a cabo la adquisición), todo parece indicar que se habrá completado sin inconvenientes en la primavera del año próximo.

El consejero delegado de Activision Blizzard, Bobby Kotick, justifica la compra en términos del alcance de King en el aún emergente mercado móvil (con un crecimiento esperado del 50% hasta 2019), y las posibilidades de aprovechar la experiencia del desarrollador para asentar las populares marcas de la compañía en estas plataformas. Por su parte, su equivalente en King, Riccardo Zacconi, destaca esos mismos valores basados en sus aplastantes cifras de usuarios cada día, además de las posibilidades de evolución a un siguiente nivel del gigante móvil.

La adquisición no define en principio cambios ni en las posiciones clave de la desarrolladora ni en su modo de operación, implicando la persistencia de King como unidad independiente que aprovechará los recursos e infraestructuras de Activision y sus marcas. Las declaraciones de los implicados y su justificación para la operación parecen apuntar firmemente hacia una mayor penetración de las franquicias tradicionales de Activision en el mercado móvil, sin que los planes para ordenadores y consolas de la distribuidora se vayan a ver particularmente afectados.

No es la primera vez que Activision acapara titulares en noticias más relacionadas con operaciones financieras que con el desarrollo de videojuegos, con el pequeño escándalo en torno a la relación con Vivendi el año pasado como caso más reciente. Mucho antes de la nueva adquisición, la compañía ya se había consolidado como responsable de varios de los éxitos más importantes de la industria en cuanto a beneficios, diversificando sus productos que además del mercado de los MMO también han sido pioneros o significativos en los eSports con Starcraft, en los juegos basados en coleccionismo de cartas con Hearthstone, en los musicales con Guitar Hero y los basados en figuras con Skylanders.
Fuente: Bussiness Wire