Apple se encuentra ante una situación delicada y contradictoria: a pesar de haber sido pionera en la implementación de
inteligencia artificial a través de Siri, la compañía se ha quedado muy atrás en un campo donde OpenAI, Anthropic, Google, Microsoft y otras compañías no dejan de extender sus tentáculos. Es prudente suponer que existe cierto temor a quedarse atrás en esta carrera pero, afortunadamente para Apple, décadas de vacas gordas han servido para llenar uno de los mayores cofres de guerra de la industria. Este dinero ocioso, que tradicionalmente Apple ha utilizado para integrar en su…