“Super Mario Bros. Wonder, que se puso a la venta en todo el mundo el 20 de octubre, suma en sus dos primeras semanas unas ventas globales de 4,3 millones de unidades”, dice Shuntaro Furukawa, presidente de Nintendo. “Esto lo convierte en el título de Super Mario más rápidamente vendido. Los títulos de la saga Super Mario tienden a tener unas ventas continuas a lo largo del tiempo. Nuestra previsión es que este título será una opción atractiva para los consumidores de cara a la próxima temporada navideña y que seguirá vendiéndose bien a lo largo del próximo año”.
Al igual que en 2017, este año Nintendo ha lanzado entregas de dos de sus sagas estrella, Zelda y Mario, y de momento la nueva aventura de Link lleva la iniciativa en ventas. The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom consiguió colocar 10 millones de copias en tres días y la última cifra conocida son los 19,5 millones de unidades vendidas a 30 de septiembre. A pesar de que Mario es un personaje que forma parte de la cultura pop, esta generación Zelda va por delante. Como comparación, Super Mario Odyssey suma 26,25 millones de copias y Zelda: Breath of the Wild ha llegado a los 31,15 millones. En ambos casos gana Switch (y Nintendo).
Siguiendo con Mario pero cambiando de medio, Nintendo también ha hablado del impacto de Super Mario Bros.: la película. La cinta ha recaudado 1.361 millones de dólares, más que cualquier otra película basada en un videojuego y la segunda mayor cifra para un film de animación, y registrado 169,84 millones de espectadores en los cines. Nintendo pone en valor que la película ha atraído a público que va más allá de los que tienen relación con los juegos de Mario, así como una audiencia de todas las edades. La compañía añade que gracias a la cinta aumentaron la venta de los juegos de Mario y los usuarios de los juegos para móviles.