Shin Megami Tensei V es un JRPG protagonizado por un estudiante de instituto normal y corriente que se ve arrastrado hasta Da'ath, un inframundo en ruinas que yace sobre los restos de lo que otrora fue la ciudad de Tokio. La única forma de sobrevivir en este hostil, decadente y posapocalíptico mundo pasa por aceptar la ayuda de un ser misterioso llamado Aogami. Tras fusionarse con él, nuestro héroe se convierte en un Nahobino, una criatura maldita que posee la capacidad de enfrentarse o aliarse con los demonios.
Este nuevo poder permitirá averiguar qué pasó con Tokio y participar en la batalla que entre la luz y la oscuridad que decidirá el destino del mundo.
El sistema de combate de Shin Megami Tensei V es por turnos y con comandos. Su clave reside en encontrar la debilidad de los enemigos, que saldrá a la luz después de lanzar diferentes ataques. No solo se trata de infligir más daño, sino que también hay que obtener turnos adicionales para prolongar la ofensiva. A medida que avanzan los turnos se rellenará el medidor de Magatsuhi, una energía que permite ejecutar habilidades especialmente poderosas para atacar al enemigo o ayudar al equipo.
Para intentar derrotar al Nahobino los demonios usarán las mismas estrategias, incluyendo las habilidades que emplean Magatsuhi, así que en los combates se recomienda ser expeditivo. Tampoco hay que descuidar la defensa si el enemigo es poderoso. Además de rivales los demonios pueden ser aliados. Aunque se haya iniciado un combate contra ellos siempre existirá la posibilidad de llegar a un pacto para que cambien de bando, pero antes tocará convencerlos para que se unan a la causa del Nahobino.
Los demonios se pueden fusionar para crear otros nuevos que ofrecen más posibilidades. Fusionar ciertas especies permite crear poderosos aliados que no se pueden conseguir de ninguna otra forma. En Da'ath hay más de 200 demonios.
Si hacemos caso a la crítica, parece que Atlus (Persona 5) ha conseguido de nuevo ofrecer un JRPG convincente. Shin Megami Tensei V tiene una nota media de 85 en OpenCritic y 86 en Metacritic.