Sony ha comunicado el cierre de Firewalk Studios y Neon Koi con un comunicado que por momentos recuerda a otros del pasado que versaban sobre lo mismo. En el mensaje firmado por Hermen Hulst, máximo responsable de Sony Interactive Entertainment, la compañía explica que constantemente evalúa su catálogo de juegos y el estado de sus proyectos para asegurarse de que cumplen con las prioridades comerciales a corto y largo plazo. Como parte de este proceso, Sony ha tomado la "difícil decisión" de cerrar Neon Koi y Firewalk Studios.
En su mensaje Hulst afirma que "expandirnos más allá de los dispositivos PlayStation y crear experiencias online junto a nuestros juegos para un jugador son áreas clave para nosotros". Sin embargo, admite que deben ser estratégicos a la hora de llevar sus títulos a nuevas plataformas "y reconocer cuándo nuestros juegos no cumplen con las expectativas de los jugadores". Respecto al sector móvil, el ejecutivo dice que sigue siendo una área en la que quieren crecer, pero añade que se encuentran en sus primeras etapas y que para tener éxito cualquier producto debe estar a la altura "del pedigrí de PlayStation Studios".
Hulst también revela que tras cerrar los servidores de Concord llegaron a "explorar todas las opciones", pero que después de pensarlo mucho decidieron que el mejor camino a seguir era cerrar definitivamente el juego y el estudio. El ejecutivo reconoce que el espacio de los shooters JcJ es muy competitivo y lamenta que ellos no hayan podido alcanzar sus objetivos con Concord. Hulst añade que aprenderán de sus errores para seguir mejorando sus capacidades a la hora de desarrollar juegos como servicio, un modelo que no abandonarán.
Neon Koi era un equipo de desarrollo con sede en Berlín y Helsinki que cuando Sony lo compró en 2022 se encontraba desarrollando un juego de acción como servicio para móviles. El trabajo de Firewalk Studios es ampliamente conocido. Concord fue un shooter JcJ que abrió sus servidores el 23 de agosto y los cerró menos de dos semanas después. Este título pasará a la historia por ser uno de los mayores fiascos de la industria del videojuego, así que el cierre de Firewalk Studios, un equipo que Sony adquirió en 2023, no pillará a nadie por sorpresa.