Durante ese trimestre la división Game & Network Services donde encontramos PlayStation 4 y PlayStation Network ingresó 2.900 millones de euros, un 11% menos que durante el mismo periodo del año pasado. El beneficio operativo cayó un 20% hasta los 171 millones de euros. Los motivos de este descenso lo encontramos en la la reducción del precio de PlayStation 4, que no ha podido compensar el aumento en las ventas de software o las reducciones en los costes del hardware.
La distribución de PlayStation 4 durante el trimestre se situó en 3,9 millones de unidades, 100.000 menos que hace un año. A pesar de que Microsoft no revela el número de Xbox One vendidas, PlayStation 4 se mantiene líder con más de 47,4 millones de consolas despachadas en todo el mundo desde su lanzamiento. Sony sostiene que terminará el año fiscal distribuyendo 20 millones de unidades de su última consola para llegar a un total de 60 millones.
El motivo del ligero descenso en las ventas de PlayStation 4 lo encontramos en los rumores de una PS4 Slim durante el verano y el descubrimiento de PlayStation 4 Pro que se pone a la venta el 10 de noviembre por 399,99 euros. Su éxito así como el de PlayStation VR (cuyas ventas iniciales no han sido reveladas) lo conoceremos al término del actual trimestre.
Este trimestre el conglomerado Sony registró 15.200 millones de euros en ingresos, un descenso interanual del 10,8%. El beneficio neto de la compañía sufrió una importante caída del 85% y se situó en 43,8 millones de euros. A las ganancias de Sony contribuyó Sony Pictures con Cazafantasmas y La fiesta de las salchichas. No ayudaron el tipo de cambio y las ventas del área de videocámaras y cámaras digitales compactas