La exploración en Mass Effect: Andromeda pasa por el uso de la nave Tempest y su mapa de la galaxia, que nos permitirá llegar hasta las decenas de sistemas estelares y los más de cien planetas que esconde el Cúmulo Heleus, donde transcurre la historia del juego. Planetas, lunas, anomalías y naves estelares también se podrán ver desde las ventanas del buque en tiempo real.
Desde Bioware prometen que cada mundo donde se pueda aterrizar presentará su propia historia, personajes y desafíos. Para no salir a ciegas, antes de pisar un nuevo planeta la IA se encargará de ponerte al día e indicar cuáles son las localizaciones clave. Una vez sobre el terreno, el Nomad, un vehículo que se puede mejorar, será el responsable de que se pueda cubrir rápidamente cualquier paisaje.
Uno de los objetivos clave durante la exploración será desplegar estaciones avanzadas, que una vez encontradas y activadas serán un punto de viaje rápido. También servirán para cambiar de equipamiento, reabastecerse o llamar el Nomad. Todos los descubrimientos (nuevas áreas exploradas, personajes conocidos, misiones completadas…) ayudarán a aumentar la viabilidad del planeta, favoreciendo la creación de un puesto.
Uno de los grandes retos que contempla la exploración de Mass Effect Andromeda es la red de cámaras antiguas. Desde Bioware afirman que descubrir cómo acceder a ellas “ya es un reto que puede obligarte a recorrer todo el mundo”. Aseguran además que resolver el misterio de las cámaras “podría ser la clave para sobrevivir en Andrómeda”.
Mass Effect: Andromeda estará disponible en Europa el 23 de marzo de 2017 para PlayStation 4, Xbox One y Windows PC (requisitos).
