La mayoría de nosotros habremos alquilado alguna vez discos en un videoclub, lo que mucha gente no sabe es que esto constituye un delito contra la propiedad intelectual. El responsable de uno de estos establecimientos en Albacete ha sido
condenado a dos años de prisión y una indemnización de 35.500 euros (repartida entre discográficas y SGAE, que no puede quedar fuera de ningún pastel), tras haber sido ratificada la sentencia en la apelación. El condenado utilizaba un "truco" que seguro también habréis visto, enmascarando los alquileres bajo la forma de asociación musical.