“Históricamente, nuestro negocio se ha basado en gran medida en los AAA para consola”, dijo Perrette durante una conferencia organizada por la multinacional financiera Morgan Stanley. “Es un muy buen negocio cuando tienes un éxito como Harry Potter, hace que el año sea increíble. Sin embargo, cuando no tienes un lanzamiento o por desgracia es una decepción, acabamos de lanzar Suicide Squad este trimestre que no ha sido tan fuerte, lo transforman en volátil”. Para poner solución a esta inestabilidad la propuesta de Warner Bros. Games pasa por rodear a los AAA por juegos como servicio, free-to-play y móviles.
Hogwarts Legacy generó más de 1.000 millones de dólares durante sus primeras semanas en las tiendas y cerró con 22 millones de unidades vendidas, mientras que Suicide Squad: Kill the Justice League ha quedado por debajo de las expectativas de la compañía. La comparación interanual será “dura”, según reconoció hace poco Gunnar Wiedenfels, director financiero de Warner Bros. Discovery.
Perrette asegura que los juegos como servicio, free-to-play y móviles reducirán esa volatilidad debido a que se trata de productos que pueden dar a Warner Bros. unos “ingresos mejores y más consistentes”. “En lugar de lanzar un único juego para consola, podemos desarrollar un juego en torno a, por ejemplo, Hogwarts Legacy o Harry Potter, que sea un servicio en vivo donde la gente pueda jugar en ese mundo de forma continua”, comenta Perrette. En opinión del ejecutivo, cada una de las cuatro sagas (Mortal Kombat, Juego de Tronos, Harry Potter y DC) de la compañía es un negocio de 1.000 millones de dólares.
Además, Perrette considera que Warner Bros. está en una posición privilegiada debido a que a sus propiedades intelectuales hay que sumarle los 11 equipos de desarrollo internos. El ejecutivo también comenta que la compañía tiene un “plan de inversión estratégico” que tardará su tiempo en dar frutos. Según Perrette, las bases se están sentando ahora y los retornos podrían llegar en 2025, 2026 y 2027.