En un mensaje a la comunidad, Phil Harrison, gerente de Stadia, ha querido agradecer a los jugadores de Stadia su apoyo desde el primer día. El ejecutivo también ha comunicado que la tecnología que ha impulsado Stadia no morirá junto al servicio, ya que en Google creen que puede ser útil en otros productos de la compañía, incluyendo YouTube, Google Play y los proyectos de Realidad Aumentada. Además, el ejecutivo abre la puerta a poner esta tecnología al servicio de terceros, que la podrían utilizar para llevar sus propios juegos a la nube.
Harrison avanza que Google mantendrá su compromiso con los videojuegos y continuará invirtiendo en herramientas, tecnologías y plataformas para ayudar a los desarrolladores.
Google presentó Stadia en marzo de 2019 y desde el primer día más de uno avanzaba que el proyecto terminaría cerrando. Algunos no veían futuro a un servicio de juegos en la nube con un modelo híbrido de suscripción y juegos a la carta, mientras que otros tenían presente que Google tiene un cementerio repleto de servicios, hardware y aplicaciones. En concreto, son 274 víctimas según Google Graveyard. Durante estos años los rumores sobre el cierre de Stadia no han sido pocos, pero la compañía siempre los negaba. La última vez fue el pasado verano.
Para Google, la parte positiva es que consiguió ofrecer un servicio de juegos en la nube que funcionaba bien en múltiples dispositivos, pero la compañía no convenció con su modelo de negocio. Pagar por una suscripción mensual y además tener que comprar los juegos no fue una buena idea. Con el tiempo la suscripción pasó a ser opcional para jugar a 1080p, pero ese cambio no convenció. La competencia, incluyendo Game Pass Ultimate de Microsoft, ofrece un catálogo con más de 100 juegos en la nube a cambio de 12,99 euros al mes.