Microsoft ha anunciado que a finales de año Xbox Cloud Gaming estará disponible en Xbox One y Xbox Series para los suscriptores de Xbox Game Pass Ultimate. De esta forma los jugadores de la pasada y actual generación de consolas Xbox tendrán la opción de jugar a los títulos incluidos en el servicio sin necesidad de descargarlos. En Xbox One esto significa tener acceso a la nueva generación (mediante la nube), mientras que en Xbox Series es una alternativa para ahorrar tiempo y espacio en el SSD.
Cuando Xbox Cloud Gaming esté disponible en consolas Xbox los jugadores de One y Series solo tendrán que navegar por el menú de Xbox Game Pass, identificar los juegos con el icono de la nube e iniciarlos pulsando en Jugar. No solo se trata de jugar en la nube. Esta opción permite echar una partida mientras se descarga el título o saltar a una sesión multijugador con amigos con una invitación y sin necesidad de completar la instalación. En Xbox One hay más ventajas, ya que por ejemplo el juego en la nube permitirá jugar a títulos de nueva generación.
Hasta nuevo aviso y para “garantizar una experiencia de alta calidad”, el juego en la nube de Xbox Cloud Gaming se transmitirá a 1080p y 60 FPS en consolas, de la misma forma que ahora lo hace en PC, teléfonos móviles y tabletas. Actualmente Xbox Game Pass ofrece más de 100 juegos que pueden ser ejecutados en la nube y pronto uno de ellos será Microsoft Flight Simulator.
Para jugar en la nube mediante Xbox Cloud Gaming haciendo uso de una Xbox One o Xbox Series el procedimiento es el mismo que en cualquier otro dispositivo: basta con conectar el mando a la consola y elegir uno de los juegos disponibles en Xbox Game Pass con soporte para este servicio. También hay que tener en cuenta que existen unos requisitos para la conexión, que debe tener una velocidad mínima de 10 Mbps, aunque se recomienda disponer de 20 Mbps. Como siempre, el cable es mejor que el wifi, pero también se puede jugar mediante una conexión inalámbrica (de 5 Ghz si es posible).
