“La reencarnación es la piedra angular de nuestro modo de vida”, dice el resumen de la historia del juego. “Celebramos las vidas que nos han sido dadas y rezamos por las que están por venir. La tristeza que aflige a los vivos ante la muerte hace que los fallecidos se extravíen. Esta es la peor afrenta para la reencarnación. Por eso transformamos nuestro dolor en alegría al despedir a los muertos. Pero las almas de aquellos que contienen sus lágrimas en vida todavía necesitan la salvación en la muerte”.
Esta última tarea corresponde a los Watchers, cuyo propósito es guiar a las almas errantes y servir de guardianes del mundo de los vivos y del más allá. Para cumplir con su cometido los Watchers, que aprecian la vida por encima de todo, cortan los lazos que vinculan a los perdidos con este mundo y los envían al próximo. Oninaki seguirá la historia de uno de estos guías llamado Kagachi.