Detrás de esta segunda operación estaba la compañía japonesa, solicitando nada más y nada menos que 13 años de prisión por presuntos delitos de revelación de secretos, contra la propiedad industrial e intelectual. Hasta aquí nada nuevo y que no hayamos visto anteriormente en casos sonados como el de Alechip, para quien llegaron a pedir 23 años de cárcel. Pero la cosa se vuelve interesante cuando el día antes del juicio el acusado recibe una llamada de Nintendo proponiendo un pacto, aceptando una simple pena de faltas con multa de 90 euros.
Podríamos habernos encontrado por tanto con una nueva pantomima como la de ChipSpain, y Nintendo presumiría de dos "victorias judiciales", pero afortunadamente para los usuarios de estos dispositivos, el responsable de la tienda rechazó el pacto. Según sus propias palabras:
Julio de Dvdconsolas escribió:Resumiendo rebajaban de 13 años de prisión que me pedían a una simple falta pagando una multa de unos 90€ (casi lo mismo vamos). Claro está que al aceptar la imposición de la multa y reconocer que se ha cometido una falta no se podía volver a vender flashcarts ya que estaríamos cometiendo la misma falta. Como defiendo nuestros derechos como empresarios y el los de los consumidores en estos temas, teníamos todo a nuestro favor decidí continuar con el proceso y que fuera el juez quien decidiera.
Pero las sorpresas no terminan aquí, ya que llegado el día del juicio oral, el pasado 1 de octubre, la acusación particular retira todos los cargos y por tanto el juez declara una sentencia firme de absolución y la devolución de todo el material incautado. Según nos ha confirmado el abogado Sánchez Almeida, que no ha llevado este caso, el movimiento de retirada por parte Nintendo se justifica ante la previsión de que el juez fallara en su contra, de modo que así evita que la sentencia se pronuncie sobre el fondo del asunto, tratando de evitar así también la repercusión mediática.
Pero aunque la sentencia, a la que hemos tenido acceso, efectivamente no entra en el fondo del asunto, sí dice explícitamente que la acusación particular (Nintendo) retira su petición de condena "por considerar que los hechos objeto de enjuiciamiento no constituían infracción penal", y de ahí nuestro titular. También afirma el juez que dado que los objetos intervenidos (los cartuchos flash) no proceden de actividad criminal alguna ni guardan relación con su comisión, deben ser devueltos a sus propietarios.
Desde aquí nuestra nueva enhorabuena a Dvdconsolas por mantenerse firme y lograr su segunda victoria judicial. Esperamos que sea la definitiva.
