Creo que no hay que mezclar churras con merinas.
Desde hace muchos años, a las consolas de Nintendo se juega por sus juegos. Yo separo el tema Third Party.
Compré la Switch en 2017 al poco de salir y disfruté muchísimo durante los dos años siguientes. Zelda Botw, Donkey, Odyssey... Y mereció la pena.
Luego la vendí y seguí jugando a PS4 y luego a Series S.
Hace un mes me he vuelto a comprar la Switch Oled para terminar el catálogo que se me quedó pendiente.
Y si quiero un juego de gráficos Next Generation me pongo la Series S o miro una PS5 de segunda mano.
Lo innegable es que a mí me gustan los juegos de Nintendo y no comparo Elden Ring (juego pasado en Series S) con Zelda Tears, estoy disfrutando de las físicas de uno cuando antes disfrutaba con los gráficos del otro.
Podría quejarme de las texturas de Zelda o podría quejarme de las físicas inexistentes de Elden Ring.
Pero no tiene mucho sentido.
Quejarte de una compañía que ofrece otro producto diferenciado y que no te obliga a comprarlo me parece absurdo. Máxime cuando mejora el mercado con una apuesta distinta.
Hay que intentar quitarse la bufanda y juzgar por el catálogo de juegos. No he comprado PS5 porque su catálogo no me ha llamado de momento. No se me ocurriría criticar el dispositivo porque estéticamente me parece horroroso.
Drift han tenido mis mandos de PS4, de Series S y los sticks de Switch. El mando pro de Switch no me dio problemas.
Todos los dispositivos tienen defectos y son señalados.
Habrá que ver con el tiempo si Switch 2 resuelve el drift. Si no lo hace, se criticará y punto. Cómo se ha hecho con el resto. Ahora, yo enciendo una Series S, mi antigua PS4 slim o mi actual Switch Oled y disfruto jugando a sus juegos.
Las consolas suelen ser para jugar.