Sufriendo y disfrutando a partes iguales de Crash Bandicoot 4: It's About Time. Llevo más de 20 horas jugadas y ya puedo afirmar que es posiblemente uno de los juegos de plataformas más difíciles que he jugado jamás (y soy de los que comencé a jugar con "Manic Miner"). Acabar las fases sin cumplir los objetivos es relativamente asequible, pero para completarlas en su totalidad hay que sudar tinta. La trilogía inicial, en comparación, es un paseo,
Me está gustando mucho la cantidad y variedad de fases, con dinámicas de juego muy diferentes (me ha sorprendido la inclusión de algunos personajes jugables que no esperaba).
Es una pena que en mi opinión se hayan pasado tres pueblos con la dificultad, y pese a ello, lo considero uno de los mejores plataformas que se pueden jugar en Switch. Gráficamente me ha parecido notable, aunque le vendría bien una mejora de resolución para jugarlo en Switch 2 en condiciones similares a otras consolas.
En todo caso, un juegazo, imprescindible si os gustan los plataformas exigentes.
Saludos