Esta nueva característica complementa la transcripción de audios, introducida hacia finales del año pasado.
La función, que por ahora solo está disponible en inglés y para Estados Unidos, pero que también llegará a otros países y en otros idiomas, utiliza la tecnología de procesamiento privado de Meta, por lo que ninguno de los mensajes abandona el teléfono y en teoría la compañía no recibe información alguna sobre sus contenidos.
Los resúmenes de las conversaciones se sintetizan en forma de lista de puntos para facilitar su lectura, diferenciando a los interlocutores para evitar perder el hilo de quién dijo qué.
Según indica WhatsApp en su blog oficial, estos resúmenes o sumarios solo son visibles para el usuario que los genera, por lo que los interlocutores al otro lado de los mensajes desconocen la forma en la que han sido leídos. Usamos el plural porque los resúmenes no solo servirán para facilitar la lectura de esos monólogos que se suelen dejar "para otro momento", sino también para grupos en los que rápidamente se pueden generar conversaciones extensísimas en muy poco tiempo. En cualquier caso, si no se desea que los grupos de WhatsApp tengan acceso a funciones de IA, su integración se puede restringir desde el panel de Privacidad Avanzada.
WhatsApp no ha dado por ahora la menor indicación de cuándo llegarán sus resúmenes a otros países, limitándose a señalar que su expansión internacional tendrá lugar de aquí a finales de año.