Apple lanzaría en 2024 sus propias pantallas MicroLED para el iPhone y el Watch, reduciendo su dependencia de terceros

Alejo I
Vuelven las noticias sobre las pantallas MicroLED de Apple. Que no es poca cosa. Han pasado más de cuatro años desde que por primera vez llegaron informaciones acerca de la intención de la firma de Cupertino de diseñar sus propias pantallas basadas en esta tecnología autoemisiva de alta tecnología, pero desde entonces solo hemos tenido el más absoluto silencio. Ahora, Mark Gurman, posiblemente una de las personas mejor conectadas en lo que se refiere a las interioridades de Apple, afirma que el año que viene comenzaría la producción en masa de estos componentes.

Según ha podido saber Gurman a través de sus fuentes, Apple piensa iniciar en 2024 la fabricación de pantallas MicroLED en sustitución de las actuales OLED como forma de reducir su dependencia de proveedores externos como LG y Samsung, que imponen sus propias condiciones y tienen lógicamente sus propios calendarios y márgenes de beneficios. El primer dispositivo en recibir las nuevas pantallas sería el Apple Watch, seguido a continuación del iPhone.

Por ahora se desconoce si Apple también piensa utilizar la tecnología MicroLED en sus ordenadores portátiles. Llegados a este punto, no conviene especular en demasía, puesto que el propio Gurman indica que Apple se había fijado 2020 como fecha para el estreno de sus pantallas MicroLED, pero "los costes y desafíos técnicos" han terminado retrasando un proyecto que aún podría irse a 2025, con la posibilidad de vender dispositivos con y sin pantallas MicroLED mientras acelera la cadena de suministro.

Vídeo promocional de Samsung explicando la tecnología MicroLED de sus televisores.

La tecnología MicroLED es posiblemente una de las más prometedoras soluciones de imagen actualmente en desarrollo, pero por ahora sus costes son elevadísimos, reduciendo su integración a productos con un gran margen de beneficios como televisores de ultralujo con precios de seis dígitos (que con suerte caerán a cinco dígitos a lo largo de 2023). Lógicamente, una pantalla más pequeña debería implicar unos costes de fabricación muy inferiores.

A diferencia del LCD, la tecnología MicroLED ilumina cada píxel de forma independiente, pero a diferencia del OLED, en teoría pueden generar una gama de colores completa sin necesidad de filtros. Además, las pantallas MicroLED son más brillantes y no utilizan compuestos volátiles, lo que debería eliminar los quemados y aumentar la durabilidad a largo plazo. El resultado es una calidad de imagen espectacular. Según las fuentes de Gurman, las pantallas de Apple son capaces de mostrar imágenes como si estuvieran pintadas encima del propio cristal del dispositivo.

El diseño de pantallas, especialmente si hablamos de tecnologías novedosas como el MicroLED, requiere inversiones al alcance de muy pocas empresas. Apple es una de esas pocas firmas con la cintura para ello. Su lanzamiento se englobaría en una estrategia más amplia destinada a mejorar la autonomía tecnológica de la compañía; un plan que también la llevará a crear su propio chip de comunicaciones Wi-Fi y Bluetooth para sustituir los componentes de Broadcom y Qualcomm.
Fuente: Bloomberg