En su nueva aventura Rico Rodríguez viaja hasta Solís, una enorme y heterogénea región de 1024 kilómetros cuadrados ubicada en Sudamérica que presenta cuatro biomas diferentes: selva, pradera, montaña y desierto. Cada bioma posee fenómenos meteorológicos únicos y simulados incluyendo tornados, nevascas y tormentas tropicales. Una climatología a la que se le puede sacar partido y cuya destrucción se sumará a la que nuestro protagonista deja a su paso desde la primera entrega de la serie.
Rodríguez regresa a la acción con su paracaídas, su traje aéreo y su clásico gancho de anclaje, que vuelve con mejoras y opciones de personalización para crear acrobacias y estrategias de destrucción. Su objetivo será encabezar una rebelión, derrotar a la organización militar privada Mano Negra y enfrentarse a Gabriela Morales. Además, deberá descubrir el pasado de su padre en Solís y el origen de su clima extremo.
Cuando el juego fue presentado durante el E3 2018 el director Francesco Antolini dijo que con esta entrega “hemos cogido lo que más les gustó a los jugadores en los juegos anteriores y lo hemos combinado con elementos nuevos, físicas mejoradas y una jugabilidad perfeccionada para crear el Just Cause más ambicioso hasta la fecha”. En su opinión la “meteorología extrema lo cambia todo” y esto ha sido posible gracias a Apex, el mismo motor que se usará en Rage 2.
Just Cause 4 llega a las tiendas junto a un pase de temporada incluido en la Gold Edition y que liberará sus tres paquetes de contenido a lo largo del 2019.