Samsung presenta una pantalla OLED 4K de 15,6 pulgadas para portátiles

Las pantallas OLED han logrado hacerse un hueco importante en los escalones más altos del mercado televisivo gracias a su negro absoluto y un contraste acordemente inalcanzable por otras tecnologías actuales. Su presencia a nivel informático, sin embargo, es residual fuera de algunos monitores muy especializados. Esta situación podría cambiar dentro de poco gracias a Samsung Display, que ha anunciado una pantalla OLED de 15,6 pulgadas con resolución 4K.

Creada especialmente para ordenadores portátiles, este panel orgánico brinda un brillo comprendido entre 0,0005 y 600 nits, por lo que sobre el papel superaría incluso la nueva especificación VESA DisplayHDR 500 True Black (aunque el brillo final podría variar en función de las optimizaciones de consumo realizadas por cada fabricante).

Según Samsung, la oscuridad de su negro es 200 veces superior que la de otras pantallas LCD, mientras que el blanco es el doble de brillante. Este es un dato importante, puesto habitualmente los paneles OLED son mucho menos brillantes que los LCD iluminados por LED. Habrá que ver cuál es el rendimiento sostenido.



El OLED se perfila finalmente como opción para monitores

Si bien hay un puñado de ordenadores portátiles con pantallas OLED, estamos hablando de modelos relativamente minoritarios como la versión más avanzada del Lenovo ThinkPad X1 Yoga, que tiene un precio extraordinariamente elevado. Durante este pasado CES Dell también anunció que algunos de sus portátiles equiparán pantallas OLED de forma opcional, pero por ahora se desconocen precios y especificaciones.


Más allá del problema del precio, la tecnología OLED está menos dominada en entornos informáticos. Aunque su latencia es mínima, el problema de las imágenes quemadas siempre ha estado ahí y podría verse acrecentado en entornos como Windows, donde gran parte de los elementos permanecen fijos durante horas.

Que Samsung se atreva a lanzar comercialmente paneles OLED para ordenadores portátiles implicaría que las dificultades encontradas adaptando esta tecnología para su instalación en monitores han sido superadas o como mínimo mitigadas en gran medida. Igual de importante es el hecho de que no es la única empresa con un producto similar entre manos. Hacia finales de 2018 la japonesa JOLED mostró varios prototipos de monitor basados en la misma tecnología, si bien esta sociedad formada por Sony y Panasonic apunta por ahora a equipos de sobremesa.