Adelantándose a los gigantes de la tecnología, el Human Media Lab de la Universidad de Queen's ha desarrollado el primer prototipo funcional de PaperFold, un teléfono plegable que utiliza hasta tres paneles de tinta electrónica. El dispositivo multipantalla le da una vuelta al uso de los smartphones permitiendo cambiar la forma del aparato según la función que deseemos realizar.
La idea se basa en la posibilidad de unir o separar las pantallas entre sí para después colocar el conjunto en diferentes posiciones acordes a cada necesidad, o bien utilizar las "tejas" por separado. Además de poder plegar el smartphone mediante bisagras magnéticas, las pantallas de PaperFold son altamente flexibles en sí mismas al estar conformadas por un panel e-ink sobre un sustrato impreso en 3D.
Las propiedades únicas del prototipo permiten por ejemplo utilizar una pantalla como teclado virtual, expandir una barra de herramientas complementaria o también maximizar el espacio de pantalla para mostrar un mapa. Los desarrolladores del proyecto aseguran que la inspiración de PaperFold surge de la versatilidad de forma del papel convencional, marcando como objetivo la creación de dispositivos móviles "maleables".
"En PaperFold, cada teja de pantalla puede funcionar de forma independiente o como parte de un único sistema", explica el Dr. Roel Vertegaal. "Permite múltiples factores de forma de dispositivo, permitiendo funciones móviles que requieran una gran superficie o teclados, a la vez que se retiene una forma ultra compacta, ultra fina y ligera".
El concepto de smartphone se vale de los proyectos anteriores del Human Media Lab entre los que figuran el teléfono flexible Paperphone y la tableta PaperTab. Anteriormente otras propuestas como Courier de Microsoft, Echo de Kyrocera o el cuaderno digital de Sony habían coincidido en algunas características con PaperFold, pero en ningún caso aunando varias pantallas, flexibilidad y modularidad en un mismo dispositivo.