A menudo, los jugadores irrespetuosos con los demás pueden arruinar la experiencia en línea y esto provoca que algunos usuarios no se comuniquen o se recluyan con amigos en canales privados. El objetivo de este sistema es atajar ambos problemas. Por un lado aislar de las partidas a los jugadores problemáticos, intolerantes o racistas, para animar a los buenos usuarios a utilizar los canales de comunicación públicos.
El sistema no permitirá que un grupo de usuarios conspire para hundir a un jugador al lado oscuro. Pero si un jugador tiene varios reportes negativos durante un periodo de tiempo, se le rebajará la reputación y pasará a jugar con los jugadores problemáticos. En casos de faltas flagrantes, el descenso de reputación será inmediato.
Al igual que el Gamescore, el nivel de reputación será visible para todos. Además existirán recompensas y castigos que dependerán de la reputación que tenga el usuario.