Para ello, el servicio en la nube Microsoft Health ya es compatible con varias plataformas de fitness y con sistemas operativos más allá de Windows, permitiendo recolectar datos de dispositivos Android Wear o de los sensores de iPhone 6. Esta filosofía se extiende al Microsoft Band que ofrece compatibilidad para Windows Phone, Android e iOS con su propia aplicación de seguimiento.
Microsoft Health monitorizará datos como distancias recorridas, ritmo cardiaco o eventos en el calendario para ofrecer un análisis pormenorizado del estilo de vida del usuario y consejos para mejorarlo. Según la compañía, cuanta más información se recabe más preciso y útil será el análisis devuelto, asegurando que la privacidad de los datos es la "mayor prioridad" en todo el proceso.
Respecto al wearable estrella de la plataforma, Microsoft ha presentado un brazalete diseñado para llevarlo puesto las 24 horas con funciones de notificación mediante Bluetooth 4.0 y todas las bondades del asistente Cortana. El dispositivo incluye un sistema de diez sensores inteligentes que la compañía pretende licenciar junto a un SDK para que otros fabricantes lo puedan incluir en sus dispositivos.
Entre otras características técnicas aparece una pantalla TFT de 1,4 pulgadas a 320x106 píxeles, resistencia a las salpicaduras de agua (pero no sumergible) y una batería dual de 100 mAh que promete 48 horas de uso en condiciones normales, con un tiempo de carga de 1,5 horas. El wearable estará disponible a lo largo del día de hoy en Estados Unidos a un precio de 199 dólares (158 euros), de momento sin información de disponibilidad en el resto del mundo.