Según el comunicado del departamento, los piratas consiguieron acceder a datos técnicos de Xbox One de forma previa a su lanzamiento, a copias en desarrollo de Call of Duty: Modern Warfare 3 y Gears of War 3, y a software de entrenamiento para pilotos de helicóptero. Entre los cargos presentados figura conspiración para cometer fraude informático, infracción de derechos, fraude telemático, fraude postal, robo de identidad y robo de secretos comerciales.
Dos acusados ya se han declarado culpables de algunos cargos y recibirán una sentencia definitiva el próximo 13 de enero de 2015. El organismo judicial asegura que la condena del canadiense David Pokora será la primera que se aplique a un ciudadano extranjero por robo de secretos comerciales desde fuera de Estados Unidos.
Los hackers que se han declarado culpables se enfrentan a penas de hasta cinco años de prisión y multas de al menos 250.000 dólares. El departamento también menciona en su comunicado que el australiano Dan Henry, que había detallado los robos en Kotaku antes de ser detenido, será juzgado bajo las leyes de su país de origen por colaborar con el grupo de hackers.